miércoles, 20 de septiembre de 2017

Nuevo audio del parche 7.3.2: El final de Legión




Al derrotar a Argus en el Trono Ardiente, el primer Cazador de Demonios de la historia sacrifica su ser para volverse el carcelero del Titán Caído Sargeras. Enterado de lo que le deparó el destino, antes de adentrarnos en la raid, nos entrega una un mensaje dirigido para sus seres queridos: Tyrande, Malfurion y tú, Campeón de Azeroth.



Mensaje de Illidan:
"En el momento que el camino hacia Argus se abrió, mi mirada cayó instantáneamente sobre el mundo natal de la Legión y supe de inmediato que no volvería. 
Enfrentaré mi destino, pase lo que pase. Sin embargo, aún tengo algunos asuntos sin resolver. Viejas heridas que me gustaría sanar. 

Este cristal contiene dos mensajes: uno es para mi hermano Malfurion y el otro es para Tyrande. Confío en que los entregues en mi nombre campeón. Cuando hayan escuchado mis palabras, deja el cristal sobre el Monte Hyjal, a orillas del Pozo de la Eternidad".

"Héroe, has presenciado los ecos de mi pasado. Por eso, te pido que pongas un punto final a esos asuntos. 
¡Ahh! El Pozo de la Eternidad. No soy nadie para ponerme sentimental, pero si algo encarna mi compromiso con Azeroth, es la fuente de poder que creé hace tanto tiempo".

"Basta de pensar en el pasado. El cristal que dejé para que encuentres no tiene dos mensajes, sino tres. El último es para ti, campeón. Has demostrado tu compromiso con Azeroth. Tu dedicación, tu sacrificio, rivaliza con el mío. Pero se te pedirá más, mucho más. Incluso ahora, los enemigos se reúnen y las sombras se oscurecen. A partir de este día, la defensa de nuesto mundo, de todo lo que deseamos descansa contigo".

"Malfurion, incluso en el vientre materno nos enfrentamos el uno a otro. La lucha nos ha seguido durante toda nuestra vida. Las enseñanzas de Cenarius fueron siempre tu camino. Yo sentí otro llamado... Era el poder que buscaba. Pero ese poder no era para conquistar o para gobernar, era un medio para lograr un fin. Para salvar a Azeroth de un enemigo imparable".
"Tu nunca confiaste en mis intenciones, aunque supongo que yo tampoco hice las cosas fáciles para ti. Pero ahora, mientras mi destino se vuelve claro, deseo calmar la lucha que nos ha dividido desde hace mucho tiempo. Incluso cuando la Legión se vaya, nuevas amenazas se presentarán. No hay nadie en quién confiar para enfrentarlos, más que tu, hermano".
"Has pasado toda una vida luchando por el sueño de lo que Azeroth podría ser. Ahora debes luchar por lo que es. Cuida de Tyrande. Escucha sus consejos. Ella siempre fue la mejor de nosotros. El camino por delante será largo... Pase lo que pase, brinda honor al apellido Tempestira".

"Tyrande, hace mucho tiempo confiaste en mí lo suficiente como para desafiar los deseos de Malfurion y liberarme de mi prisión, pero con el tiempo, esa fe en mi se perdió. Y al igual que mi hermano, llegaste a creer que las elecciones que hice me habían dirigido hacia la oscuridad. Quiero que sepas que el camino que tomé tiene un solo propósito, salvar nuestro mundo. En aquellos momentos en que me enfrentaba a la duda, me mantuve firme a una constante, a un pilar. Tu. Tu siempre has encarnado lo mejor de Azeroth, Tyrande. Tu fe, tu devoción, incluso en los tiempos más oscuros. Mi fe en ti nunca flaqueó... Mi destino, mi deber, ahora son claros para mi".
"Dejo la defensa de Azeroth en tus manos. Y en las de mi hermano. Cuida de él, Tyrande"

 "Aunque a veces deseaba que tu corazón hubiese tomado una decisión diferente, al final, se que fue la correcta".

Respuesta de Tyrande:
"A lo largo de mi vida, he presenciado dos grandes Cataclismos. Madre Luna, te ruego por que no vea un tercero. 
Siento el toque de un hechicero sobre este cristal...
Palabras de arrepetimiento. 
Sin embargo, debo preguntarme si él realmente quiso decirlas. Después de que Illidan viera la derrota en la cima del Templo Oscuro, traté de dejar ir mis sentimientos, mi desconfianza y amargura.
Cuando supe que estaba vivo, encabezando la lucha contra la Legión en la Costa Quebrada, no pude hablarle... El tiempo de hablar ha pasado"

"Parece que el tiene un deber que cumplir... al igual que nosotros. Vamos, campeón"

Respuesta de Malfurion: 
"El cristal. Escucho una voz familiar.
Mi hermano. Hizo decisiones egoístas, trajo dolor a tantos. Sus transgresiones son difíciles de perdonar. Y sin embargo... hubo momentos en los que luchamos por una causa común. Un propósito compartido.
Hmm... esos fueron buenos días.
Pero ahora no es momento de reflexionar sobre arrepentimientos personales. Tenemos que sanar el mundo, campeón. El alma de nuestro mundo está en agonía".

Comentario del blog: No te merecemos, Lord Illidan...
Traducción: Elianor